Infecciones bacterianas en la piel: ¿Cómo cuidarme?
La piel es el órgano más extenso del cuerpo, y entre sus innumerables funciones está servir de barrera protectora ante la presencia de agentes agresores como virus, bacterias y hongos. La existencia de una puerta de entrada que comunique con el exterior, como son las fisuras o excoriaciones, puede provocar que nuestro organismo entre en contacto con elementos patógenos, volviéndose vulnerable ante ciertos agentes infecciosos que pueden desencadenar enfermedades tanto locales como sistémicas. Aquí entran las infecciones bacterianas en la piel.
Por Dra. Francia Rosa Rodríguez, dearmatóloga clínica y estética (@dra.franciarosaderma)
Consultorio: Materno Infantil Plaza Bella Terra Mall, 2do. Nivel
¿Cómo clasifico las infecciones bacterianas en la piel?
Las infecciones bacterianas de la piel se pueden clasificar dependiendo de distintos parámetros: las que se originan en una piel sana son primarias. La puerta de entrada no es obvia, aunque puede sospecharse de traumas menores. Las infecciones secundarias se desarrollan en pacientes con lesiones preexistentes, lo cual sirve como puerta de entrada para los organismos (dermatitis atópicas, úlceras y otras lesiones eczematosas).
Por su localización, pueden ser:
- epidérmicas
- dermoepidérmicas
- del folículo pilosebáceo
- de las glándulas sudoríparas
- de la fascia muscular
- del músculo
La severidad varía ampliamente desde una simple erupción cutánea superficial, como el conocido impétigo, hasta infecciones profundas y necrotizantes que requieren de tratamiento quirúrgico.
¿Cuáles son las infecciones bacterianas en la piel más comunes?
Entre las patologías más frecuentes que observamos en consulta se encuentran la foliculitis, los forúnculos, los abscesos, la erisipela y la celulitis, diferenciadas entre sí por el lugar de afectación y profundidad.
Las bacterias que más frecuentemente producen infecciones cutáneas son los estafilococos y estreptococos; este tipo de infecciones se denominan piodermitis. Otros agentes bacterianos que pueden originar infecciones cutáneas, aunque con menor frecuencia son: clostridios, micobacterias no tuberculosas, corinebacterias, bacilos gramnegativos e infecciones polimicrobianas mixtas.
¿Cómo se identifica y se trata?
Se debe identificar el agente causal y sensibilidad a antibióticos mediante la toma de muestras o cultivo de la secreción para un correcto tratamiento, el cual puede incluir antibióticos tópicos, sistémicos o resección quirúrgica.
Cuidado ante todo
Para prevenir las infecciones bacterianas es necesario cuidar nuestra piel con productos no abrasivos. Debemos usar los jabones tipo syndet, con un ph neutro que mantendrá nuestra barrera cutánea en buen estado, así como mantener una hidratación adecuada para disminuir el riesgo de presentar fisuras o prurito por una piel seca, lo que conllevará a rascado y por ende, a la aparición de heridas e infecciones.
En caso de presentar alguna fisura o herida esta debe lavarse con abundante agua y jabón; luego podemos cubrirla con un parche antiséptico para disminuir el riesgo de que se infecte.