¡Cuidado a la hora de cocinar!
Por María Bell Viguri, Médico internista, endocrinóloga y dietista del Centro Médico Vista del Jardín
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Aunque se rumora que puede provocar presión alta, por sí misma no la produce. Sólo si se consume excesivamente causa retención de líquidos, lo que a su vez puede desencadenar problemas de hipertensión. De acuerdo a la Asociación Americana del Corazón, su consumo excesivo, adicionado a otros factores de riesgo como una alta ingesta de grasas y sedentarismo puede causar enfermedades cardíacas y cerebrales.
Una cucharada de sal equivale a 2,300 mg de sodio, y el cuerpo sólo necesita 200 mg por día. Para que se tenga una idea, un estadounidense promedio consume de 3,000 a 3,600 mg por día.
La sal no es dañina, muchos alimentos la contienen, por lo que al cocinarlos no es necesario añadir una cuota extra. Por otro lado, está asociada al aumento de peso, pero hay que tener en cuenta que no tiene calorías, y que consumiéndola en cantidades adecuadas no causa retención de líquidos.
En cuanto al café
Generalmente acompaña a las comidas, solo o en combinación con leche para crear un delicioso cappuccino, por ejemplo. No obstante, le rodea un aura de especulaciones: insomnio, presión arterial alta, dependencia y gastritis.
La cantidad de café a consumir dependerá del tipo, modo de preparación y de lo habituada que esté la persona a consumirlo. Tomarlo en el día y de forma ordenada no produce insomnio, pero hacerlo una hora antes de dormir empeora la calidad del sueño.
Aunque puede producir un aumento en la presión arterial, no existe riesgo de padecerla. Y si su consumo es moderado y habitual, el efecto de la cafeína es contrarrestado por los antioxidantes que trae consigo (una taza de café de 180 ml tiene 100 mg de cafeína).
La ingesta moderada de ésta por adultos sanos (400 mg/día), no se asocia a efectos adversos, teniendo en cuenta la composición del café, su preparación, y niveles de concentración. Aunque no produce dependencia, quien lo consume y lo deja de golpe puede experimentar síntomas como fatiga, ansiedad y dolor de cabeza, pero son transitorios, desparecen en 24-48 horas. Después de cada comida, el café facilita la digestión al aumentar la secreción gástrica; no es que afecta a la mucosa, como se cree. Entre sus efectos no deseados está que por la presencia de sustancias como el diterpeno, el kahweol y el cafestol, puede producir aumento del colesterol total, colesterol LDL y triglicéridos, sobre todo en personas con colesterol alto y en quienes lo consumen sin colarlo, en papel filtro.